martes, 31 de agosto de 2010

Mallarmé, Brindis fúnebre por Teophile Gautier

Mallarmé, «Brindis fúnebre por Teophile Gautier», en Antología, Ed. Visor, p. 62:
«El espléndido genio eterno no da sombra.»

lunes, 30 de agosto de 2010

Kaidara, Amadou Hampâté Bâ (4)

Amadou Hampâté Bâ, Kaidara (Cuento iniciático peule), ed. Fondo Cultura Económica, p. 82:
«Soy el que sabe que las siete cabezas de Kaidara simbolizan los siete días de la semana, que son las siete cabezas del tiempo, los arcanos que encierran el secreto de las siete estrellas nórdicas dobles y todo lo que Gueno creó por siete, selló por siete en los siete de arriba, las siete de abajo* y las siete puertas secretas abiertas en la cabeza del hijo de Adán. Sé que los doce brazos de Kaidara sellan los secretos de los doce meses y que sus treinta pies se mueven con los misterios de las lunaciones.»
*Los siete de arriba y las siete de abajo: los siete cielos y las siete tierras según el mito. Las siete puertas son las siete aberturas de la cabeza.

domingo, 29 de agosto de 2010

Viaje a Ixtlan, Carlos Castaneda

Carlos Castaneda, Viaje a Ixtlan, Ed. Fondo Cultura Económica, pp. 162-163:
«-Voy a recordarte todas las técnicas que debes aprender -dijo-. Primero enfocas la mirada en tus manos, como punto de partida. Luego pasas la mirada a otras cosas y les echas vistazos cortos. Enfoca la mirada en tantas cosas como puedas. Recuerda que si sólo miras un momento las imágenes no cambian. Luego regresa a tus manos.
»Cada que que te miras las manos renuevas el poder necesario para soñar, conque al principio no mires demasiadas cosas. Cuatro cada vez serán suficientes. Más adelante, podrás irlas aumentando hasta que cubras todas las que quieras, pero apenas las imágenes empiecen a cambiar y sientas que estás perdiendo el dominio, regresa a tus manos.
»Cuando te sientas capaz de mirar las cosas indefinidamente, estarás listo para una nueva técnica. Te la voy a enseñar ahora, pero no espero que la utilices sino hasta que estés listo (...)
»El siguiente paso para arreglar los sueños es aprender a viajar -dijo-. De la misma forma en que has aprendido a mirarte las manos, puedes moverte con la voluntad, ir a cualquier sitio. Primero tienes que determinar a dónde quieres ir. Escoge un lugar bien conocido -puede ser tu escuela, o un parque, o la casa de un amigo- y luego pon tu voluntad en ir allí.
»Esta técnica es muy difícil. Debes realizar dos tareas: debes trasladarte con la voluntad al sitio específico, y luego, cuando hayas dominado esa técnica, tienes que aprender a controlar el tiempo exacto de tu viaje.«»

sábado, 28 de agosto de 2010

Kaidara, Amadou Hampâté Bâ (3)

Amadou Hampâté Bâ, Kaidara (Cuento iniciático peule), Ed. Kairós, pp. 18-20:
«Porque Kaidara es nada menos que el dios del oro y el conocimiento.
»Como dios del oro, se encuentra, lo mismo que éste, bajo tierra, por lo que todo el viaje de los aventureros será subterráneo. Tendrán que atravesar las 114 capas correspondientes a 11 símbolos y 11 pruebas hasta encontrarse ante el espíritu sobrenatural que ha de concederles el metal sagrado.
»Metal regio que constituye uno de los mitos fundaciones el toda África Occidental, ¿cuál es la causa de que fuese esotérico mucho antes de que se le atribuyera un valor monetario? "Porque ni se mancha ni se oxida", porque es el único metal "que se vuelve algodón sin dejar de ser hierro" y porque "con un gramo de oro se puede confeccionar suficiente hilo fino como un cabello para rodear toda una aldea"; porque, en definitiva, "el oro es el soporte del saber, pero si confundís el saber con el soporte, éste os cae encima y os aplasta".
»En la máxima anterior, aparece claramente la asociación oro-conocimiento tal como se presenta en el dios Kaidara.
»Pese a que el oro atrae más a los aventureros que el saber, lo que caracteriza a Kaidara y determina incluso su aspecto es el conocimiento. Ese monstruo de 7 cabezas, 12 brazos y 30 pies aposentado en un trono de 4 patas que gira sin cesar es la estructura misma del mundo y del tiempo, con los 7 días de la semana, los 12 meses y los 30 días del mes; es el movimiento perpetuo de la tierra (¡que los peules descubrieron mucho antes que Copérnico!). Las 4 patas son los 4 elementos básicos, los 4 cataclismos que, según las predicciones, destruirán la tierra de los hombres.
»Conocimiento del orden cósmico, pero también del desorden: el dualismo en todas las cosas y el aniquilameinto de unos seres por parte de otros seres. Conocimiento de las leyes sociales, pero también de las psicológicas: cada símbolo que se encuentra en el camino de Kaidara corresponde a un tipo humano, con su lado positivio y su lado negativo. Los tres consejos dados por el propio Kaidara pretenden hacer imperiosas -sin desvelar su secreto- las leyes de la naturaleza y las de los ancestros. ¡Ay de los que no las respeten! Pero los conocimientos del dios del conocimiento son insondables y sin duda es por eso por lo que se le denomina "límite", pues supone en efecto el límite del conocimiento humano.»

viernes, 27 de agosto de 2010

Kaidara, Amadou Hampâté Bâ (2)

Amadou Hampâté Bâ, Kaidara (Cuento iniciático peule), Ed. Kairós, pp. 80-81:
«Visteis al sobrenatural Kaidara. Se os apareció con siete cabezas, cada una de las cuales preside un día de la semana. Desplegó los treinta pies que accionan los tiempos y los doce brazos que manejan los acontecimientos. Os hizo entrega del oro. Ese metal que es bien una llave que abre muchas puertas, bien una pesada carga capaz de quebrar los huesos de muchos cuellos. (...) Hammadi, tus dos compañeros escogieron dos fines doloresos: la riqueza y el poder. Y han muerto por ello de manera brutal.
»Por lo que se refiere a ti, escogiste el verdadero: el conocimiento. Y en el trasfondo del conocimiento has encontrado el poder y la riqueza que codiciaban tus amigos.
»Bajo la ceiba de la prueba, percibiste al que se ocultaba: el hombre-espíritu que sólo se encuentra una o dos veces en la vida, pero nunca más de tres.
»Le curaste y, con una llave de oro, abriste sus dos labios más pesados, sin embargo, que los batientes de bronce de una fortaleza. Él grabó en ti tres saberes.«»

miércoles, 25 de agosto de 2010

Kaidara, Amadou Hampâté Bâ


Amadou Hampâté Bâ, Kaidara, Ed. Kairós, pp. 17-18:
«Encontramos, en primer lugar, algunas de sus "emanaciones", especie de espíritus sobrenaturales que son como los "conducgtos de Gueno". Tek Kaidara el iniciador, Djedo-Dewal la maléfica; o los dioses autóctonos a los que se ofrecen sacrificios: Ham, Dom, Yer, etc. Hay, además, una infinidad de genios específicos de los elementos (genios del aire, de las olas, del fuego) o que sirven a alguno de los espíritus sobrenaturales (los genios de Kaidara) o también que, libres en la naturaleza, se las ingenian bien para ayudar a los hombres, bien para atormentarlos. Si se trata de un sueño agradable, habrá sido enviado por un genio bueno; si de un mal augurio, será obra de un genio maléfico. Están, por último, los genios asignados a funciones muy especializadas: los genios de la cocina, los genios de la caza, los genios del campo o los genios del ganado cuyo jefe esKumen.
»Todo ello da una "población oculta" sumamente densa que puebla el "país de la penumbra" donde viven los "ocultos" (sudibés), o espíritus invisibles pero sujetos a toda suerte de encarnaciones.
»Dicho país es el intermediario entre el "país de la claridad", donde viven los visibles de todas las especies, y el "país de la oscuridad profunda", morada de las almas de los muertos y los por nacer que no sólo alberga las de los humanos, sino también las almas de los animales y las plantas. Éstos son los tres países de los peules. Por eso, cuando, a modo de estribillo, nos hablan en el relato del "país de los enanos", se refieren precisamente al de la penumbra, y especialmente a la región ocupada por los yamanad-yudyu, los genios pigmeos servidores de Kaidara.

Una realidad aparte, C. Castaneda (4)

Carlos Castaneda, Una realidad aparte, Ed. Fondo Cultura Económica, pp. 100-101:
«Ya deberías saber a estas alturas que un hombre de conocimiento vive de actuar, no de pensar en actuar, ni de pensar qué pensará cuando termine de actuar.
»Por eso un hombre de conocimiento elige un camino con corazón y lo sigue: y luego mira y se regocija y ríe; y luego ve y sabe. Sabe que su vida se acabará en un abrir y cerrar de ojos; sabe que él, así como todos los demás, no va a ninguna parte; sabe, porque ve, que nada es más importante que lo demás. En otras palabras, un hombre de conocimiento no tiene honor, ni dignidad, ni familia, ni nombre, ni tierra, sólo tiene vida que vivir, y en tal condición su única liga con sus semejantes es su desatino controlado. Así, un hombre de conocimiento se esfuerza, y suda, y resuella, y si uno lo mira es como cualquier hombre común, excepto que el desatino de su vida está bajo control. Como nada le importa más que nada, un hombre de conocimiento escoge cualquier acto, y lo actúa como si le importara. Su desatino controlado lo lleva a decir que lo que él hace importa y lo lleva a actuar como si importara, y sin embargo él sabe que no importa; de modo que, cuando completa sus actos se retira en paz, sin pena ni cuidado de que sus actos fueran buenos o malos, o tuvieran efecto o no.
»Por otro lado, un hombre de conocimiento puede preferir quedarse totalmente impasible y no actuar jamás, y comportarse como si el ser impasible le importara de verdad; también en eso será genuino y justo, porque eso es también su desatino controlado.»

martes, 24 de agosto de 2010

Relatos fantásticos, Mircea Eliade


Mircea Eliade, Relatos fantásticos, Ed. Kairós, p. 98:

«Y, a pesar de ello, algo había de cierto en la comparación de usted, pero únicamente si contemplamos las cosas desde una perspectiva completamente diferente. El Espíritu está siempre camufalado en la Materia, pero su razón de ser allí (si está preso o se halla provisionalmente porque está activo y así sucesivamente) la sabrá más tarde. Por otra parte, éste es el Enigma, así, con mayúscula, al que nos tenemos que enfrentar todos, la adivinanza que se plantea de modo inexorable a todos los hombres: cómo reconocer al Espíritu si está camuflado en la Materia, es decir, si, en el fondo, es irreconocible. Y así somos también nosotros, todos nosotros, señor filósofo, no sólo indestructibles, como usted decía, sino también irreconocibles.»

lunes, 23 de agosto de 2010

Una realidad aparte, Carlos Castaneda (3)

(Vaso íbero, joven cogiendo un carnassier por la lengua)
Carlos Castaneda, Una realidad aparte, Ed. Fondo Cultura Económica, pp. 288-289:
«-(...) Cuando un guerrero se ve en tales aprietos, sencillamente le vuelve la espalda al aliado sin pensarlo dos veces. Un guerrero no se entrega; por eso no puede morir del susto. Un guerrero permite que el aliado venga sólo cuando él ya está listo y preparado. Cuando es lo bastante fuerte para forcejar con el aliado, ensancha su abertura y va para afuera, agarra al aliado, lo tiene sujeto y le clava la vista exactamente el tiempo que necesita; luego hace los ojos a un lado y suelta al aliado y lo deja ir. Un guerrero, mi amiguito, es alguien que siempre manda.»

martes, 17 de agosto de 2010

Una realidad aparte, Carlos Castaneda (2)

Carlos Castaneda, Una realidad aparte, Ed. Fondo Cultura Económica, p. 262:
«Los espíritus de ojos de agua son propios de determinados sitios. El que llamé en tu ayuda es uno que yo conozco. Me ha ayudado muchas veces. Habita en aquella cañada. Cuando lo llamé en tu ayuda, no eras fuerte y el espíritu te dio duro. No era ésa su intención -no tienen ninguna- pero te quedaste allí tirado, muy débil, más debil de lo que yo suponía»

domingo, 15 de agosto de 2010

Una realidad aparte, Carlos Castaneda

Carlos Castaneda, Una realidad aparte, Ed. Fondo Cultura Económica, p. 51:
«- (...) Me gusta sentarme en parques y en terminales y observar. A veces localizo en el acto a un aliado; otras veces sólo puedo ver gente de verdad. Una vez vi dos aliados sentados en un autobús, lado a lado. Esa es la única vez en mi vida que he visto dos juntos.
»- ¿Tenía algún sentido especial que viera usted dos?
»Claro. Todo lo que hacen tiene sentido. De sus acciones un brujo puede, a veces, sacar su poder. Aunque un brujo no tenga aliado propio, mientras sepa ver puede manejar el poder observando las acciones de los aliados. Mi benefactor me enseñó a hacerlo, y durante años, antes de tener mi propio aliado, buscaba yo aliados entre las multitudes, y cada vez que veía uno eso me enseñaba algo.»

viernes, 13 de agosto de 2010

El fruto de la nada, Maestro Eckhart (5)

Maestro Eckhart, El fruto de la nada, Ed. Siruela, pp. 161-162:
«¿Cómo puede ser él una luz, si es incomprensible?, y respondo: precisamente porque es incomprensible es por lo que es una luz. Y por otro lado digo: la incomprensibilidad es una luminosidad y [ésta] es tan abierta proque su incomprensibilidad está vertida sobre su infinitud. Al haber sido vertida su infinitud sobre su simplicidad y sobre su pureza, eso hace que en Dios haya una luminosidad. Por eso es correcto decir que Dios es una luz. Aquí tienes que saber que, gracias a la luz divina, la perspectiva de esta verdad no se aprende en la escuela en los ejercicios de las criaturas, sino que se aprende en la escuela de todas las renuncias y de la separación de las criaturas. En esa enseñanza el cielo debe ser la escuela, el libro debe ser un corazón puro, la lección debe ser la eternidad, el maestro debe ser la luz increada y también la verdad. Es lo que creía David cuando dijo: "Oh Dios, en tu luz vemos la luz" [Sab 35, 10].»

jueves, 12 de agosto de 2010

Segunda epístola a los corintios

[2 Cor 3, 18], tomada de El fruto de la nada, del Maestro Eckhart, p. 55.
«Seremos transfigurados completamente y transformados.»

miércoles, 11 de agosto de 2010

El fruto de la nada, Maestro Eckhart (4)


Maestro Eckhart, El fruto de la nada, Ed. Siruela, p. 80:

«Por eso soy la causa de mí mismo según mi ser, que es eterno, no según mi devenir, que es temporal. Y por eso soy no nacido y en el modo de mi no haber nacido no puedo morir jamás. Según el modo de mi no haber nacido he sido eterno y lo soy ahora y lo seré siempre. Lo que soy según mi nacimiento debe morir y aniquilarse, pue ses mortal; por eso debe desaparecer con el tiempo. En mi nacimiento [eterno] nacieron todas las cosas y yo fui causa de mí mismo y de todas las cosas.»

domingo, 8 de agosto de 2010

El fruto de la nada, Maestro Eckhart (3)

Maestro Eckhart, El fruto de la nada, Ed. Siruela, p. 50:

«¿Qué te perjudica que permitas a Dios ser Dios en ti? Sal totalmente de ti, por la voluntad de Dios, y Dios saldrá totalmente de si por voluntad tuya. Cuando ambos salen de sí mismos, lo que queda es un uno simple. En ese uno engendra el Padre a su Hijo en la fuente más íntima. Allí florece del Espíritu Santo y allí surge en Dios una voluntad que pertenece al alma. Mientras la voluntad no es afectada por todas las criaturas, y por todas las cosas creadas, es libre. Cristo dijo: "Nadie llega al cielo que no venga del cielo" [Jn 3, 13]»

jueves, 5 de agosto de 2010

El fruto de la nada, Maestro Eckhart (2)

Maestro Eckhart, El fruto de la nada, Ed. Siruela, p. 106:
«Uno llega a ser dos, dos es uno; luz y espíritu, esos dos son uno, envueltos de luz eterna.»

miércoles, 4 de agosto de 2010

El fruto de la nada, Masestro Eckhart

Masetro Eckhart, El fruto de la nada, Ed. Siruela, p. 100:

«¿Qué significa que un escrito silencia la palabra "yo"? En primer lugar se refiere a la inefabilidad de Dios, que Dios es innombrable y que está más allá de toda palabra en la pureza de su fondo, en donde Dios no puede contener ninguna palabra ni discurso, en donde es inefable e indecible para todas las criaturas. Por otro lado quiere decir que [también] el alma es inefable y sin palabras; cuando se la comprende en su propio fondo, entonces es indecible e innombrable y allí no puede tener ninguna palabra, pues allí está más allá de todo nombre y palabra. Eso quiere decir cuando es silenciada la palabra "yo", pues allí no encuentra ni palabra ni discurso.»

martes, 3 de agosto de 2010

Chusai Oshio

«Saber y no actuar es no saber.»

Extraído de Yukio Mishima, Caballos desbocados, ed. Caralt, p. 344.

lunes, 2 de agosto de 2010

Job IV, 15-16

Job IV, 15-16:
«Un espíritu pasó, entonces, ante mi rostro, y se me erizaron todos los vellos de la carne. Se detuvo ante mí, pero no reconocí su semblante: una imagen se encontraba ante mis ojos.»
Extraído de La comunidad secreta, R. Kirk, p. 32.

domingo, 1 de agosto de 2010

La comunidad secreta, R. Kirk (3)

Robert Kirk, La comunidad secreta, Ed. Siruela, pp. 82-83:

«Nuestros industriosos y silenciosos compañeros también han sido llamados siths, o sea gente que se mantiene en paz y tranquila respecto a nosotros; por lo demás, muchos fueron los fantasmas que se aparecieron a los hombres que estaban en pos de esta Segunda Vista, con la misma forma y hablando de la misma manera que cuando estaban sometidos a un cuerpo y vivían entre nosotros, cuestión ésta que pertenece a la más antigua tradición -nuestros montañeses todavía distinguen entre sluagh saoghalta y sluagh sith, afirmando que las almas van al sith cuando salen [de los cuerpos]-. Muchos tesoros auténticos, así como asesinatos, fueron descubiertos por ánimas que abandonaban nuestro mundo, o debido a la gentileza de estos vecions aéreos nuestros.»